En el inicio del trayecto por el sendero de Las Mujeres, una de las incursiones fue gratamente sorprendida por los monos karayá (del guaraní, karaja); presencia sonora primero que llevó a aventurarse por caminos alternos para al cabo de unos minutos de travesía poder observar a la familia de monos que desde la copa de los árboles se dejaron ver, para alegría y sorpresa de los concurrentes que no dudaron en capturar el momento con su cámaras.

No fue el único grupo que pudo apreciar la presencia de estos dueños de la isla.

Una vez en la Laguna de las Mujeres, además de disfrutar del lugar se realizó avistaje de aves, entre ellas garzas, karau, tordos y chiviros, entre otros.

Satisfechos con la recorrida, el circuito concluyó en la ermita de la Patrona de la Isla y del Turismo, Virgen del Valle de Catamarca, tras lo cual y previo a una merienda campestre se procedió a la plantación de tajy e yvyra pyta, tarea a cargo de los niños, padrinos de estos árboles.

Con la caída del sol, se retornó a la Estación Náutica con la alegría a flor de piel por la tarde vivida.

La experiencia se renovará este domingo, desde las 15. Para ser parte es necesario realizar la reserva en la Dirección de Turismo, José Gómez 953 o a los teléfonos: 431762 / cel. 728060. El costo es de 300 pesos por persona.